ElCapitalista007

lunes, julio 23, 2007

iPhone+factura de AT&T=Ejem...

Acabo de recibir la primera factura de AT&T para mi iPhone. (Apple me prestó un iPhone para analizarlo, pero yo me aboné al servicio como cualquier hijo de vecino, para poder ver el proceso de alta. Eso sí, el Times me reembolsará el importe).Se trata de un documento horrorosamente complicado, diseñado por algún comité digno de los Monty Python, que tiene por misión confundir a los consumidores.Para empezar, aunque yo contraté lo que iTunes me aseguró era un plan de 60 dólares (450 minutos más Internet ilimitada), la factura me indica que tengo un plan de voz de 40 dólares y un plan de Internet de 20 dólares, y así los muestra en páginas separadas.
La primera factura en cuestión, créanlo o no, asciende a 150 dólares. Está repleta de servicios y funciones sin explicar, que tampoco se mencionaban durante el proceso de alta, como MEDIA MAX, EXPD M2M, VOICE PRIVACY y AT&T DIRECT BILL.

Tras estudiar la factura de marras surante 20 minutos, creo que he acabado entendiendo los conceptos: cargo por activación (36 dólares), cuota mensual de junio, prorrateada (26 dólares de voz y 13 de Internet), tasas e impuestos (15 dólares) y el mes de julio, facturado por adelantado (40 dólares de voz y 20 dólares de datos).

Todo eso ocupa tres páginas de letra pequeña. Pero no se lo pierdan: también he recibido SEIS PÁGINAS de listados de todos los pedacitos de datos que el iPhone ha descargado en forma de correo-e y de páginas web... ¡KILOBYTE A KILOBYTE! Todos y cada uno de los gráficos de todas y cada una de las páginas web que he visitado, todos y cada uno de los mensajes que he enviado o recibido, todo aparece en una relación detallada, con su fecha y hora. Ni siquiera me indica algo descriptivo, como 'Portada de NYTimes.com' o 'Correo electrónico'. Nada de eso: cada una de las líneas del listado indica lo mismo: "Transferencia de datos" de tipo "Datos" con el código de tarifa "MBFR", junto con el volumen en kilobytes (la mayoría, de 1K o 3K).
Se trata de un desperdicio injustificable de papel, de tinta y del combustible gastado para distribuirlo. No me sirve para nada; ¡hey, tíos, recordad que tenemos todos un plan de datos ilimitados! ¿Quién demonios necesita tanto detalle? Si AT&T cree que hay alguien interesado, que lo cuelguen en la web y lo hagan público.
Este asunto ilustra otro conflicto más entre la filosofía de elegancia y sencillez típicas de Apple y el despiste sideral de la operadora móvil con la que se han aliado.